El programa de las clases online no es, necesariamente, distinto al de las clases presenciales, por lo que no temas perderte nada. Te enviaremos toda la documentación que desees, tendrás acceso a contenidos exclusivos, te enviaré links, podrás consultarnos cualquier duda durante la clase y enviar tus prácticas para que las revisemos.

Pues…, que probablemente tu experiencia será más gratificante y divertida. Al no haber pintado antes, no tendrás que desprenderte primero de los hábitos y de los tópicos de la pintura occidental. Te diremos, por ejemplo, que el pincel oriental se sujeta, se carga y se maneja de forma diferente. O que la tinta no se comporta con la pastosidad de los acrílicos ni tiene la densidad o el olor de las pinturas al óleo.

Eso es lo mejor de todo: como en el sumi-e no se busca que las obras sean una copia fiel del modelo representado, la pintura deja así de convertirse en un ejercicio meramente estético para revelar una visión personal, interior de la persona que la practica. Vamos, que ni sufres, ni te juzgas, ni te comparas, ni te frustras… simplemente disfrutas y te relajas expresándote con el pincel. Nosotros acompañaremos durante las clases, te motivaremos y también disfrutaremos contigo. ¡Te sorprenderás!

El sumi-e, pintura japonesa zen, suiboku o suiboku-ga es una forma de expresión artística estrechamente relacionada con el zen que asienta sus raíces en el pensamiento taoísta y la pintura de los letrados de la antigua China. Se fundamenta en la regla de la pincelada única y posee el potencial de dotar a la pintura de un ritmo espiritual que solo se muestra cuando el pincel sigue el impulso del corazón y de la mente del pintor. Siempre decimos que “iniciarse en el aprendizaje del sumi-e es adentrarse en un camino de armonía y serenidad través de la tinta, el agua y el pincel”. Y creemos en ello muy sinceramente.

Si estuviésemos en un concurso de la televisión, esa sería probablemente “la pregunta del millón”. Solo podemos decirte que su técnica te sorprenderá y que disfrutarás practicándola desde la primera clase. El sumi-e tiene mucho de “disposición mental”, pero si, necesitarás armarte de paciencia, ser perseverante y… sobretodo hacernos caso cuando te digamos que “el pincel pinta solo” (si le dejas, claro). Deberás deshacerte de tu ego y practicar, practicar y practicar cada pincelada que te enseñe hasta olvidarte de su técnica, y será entonces cuando comenzará lo mejor.

Si, claro. Para las clases solo tienes que tener un ordenador y una pequeña cámara orientada hacia el escritorio. Descargarte (si no lo tienes ya) Skype, convenir con nosotros la hora de la conexión y… dejarte llevar. Y en el caso de los cursos y talleres online, igual. Te podrás descargar toda la documentación y acceder a los videos las veces que desees. Y hacernos por email todas las consultas que necesites.

Las clases tienen una duración de 45/50 minutos (aunque a veces se alarguen una hora o incluso más…) y aunque cuando se dan sueltas cuestan 15 euros. Pero lo normal es pagar por meses (60 euros/mes). En este caso, dependiendo de las fiestas (en esos días no se da clase) unos meses daremos 3, 4 o hasta cinco clases (siempre por 60 euros). A lo largo del año lo normal es que hayamos dado una media de 4 clases al mes  Respecto de los cursos y talleres, en la descripción de cada uno se especifica un tiempo estimado y los precios correspondientes en cada caso.

Las clases, siempre se pagan al comenzar el mes, mediante transferencia bancaria o a través de bizum. Si avisas con tiempo (al menos 48 horas) podemos recuperar la clase (siempre dentro del mismo mes en curso y siempre que haya disponibilidad horaria por ambas partes). Los talleres y cursos, se pagan al reservar tu plaza o al inscribirte.

No necesariamente, pero si ello te ayuda a despejar dudas, sí no hay problema. En ella podemos conocer los “tesoros del erudito” (bunbou shishou), las cuatro herramientas fundamentales que necesitarás para practicar sumi-e: sumi (tinta), suzuri (tintero), fude (pincel) y kami (papel) y te diré precios y lugares dónde puedes comprarlas.

También necesitarás un trozo de fieltro grueso de 60×40 cms (shitajiki), un pisapapeles (bunchin), un recipiente con agua (hissen),… pero de momento no te preocupes ni compres nada. Los materiales que necesitas para practicar el sumi-e ni son muchos ni resultan necesariamente caros. Así que, espera a la primera clase. Te lo contaremos todo.

En la primera clase también te preguntaré por tí, nos ayudará a enfocar las clases saber cuál es tu disposición hacia el sumi-e. Para nosotros es importante conocer qué es lo que te ha llamado la atención, por qué el sumi-e ha despertado tu interés…

Si tienes cualquier duda o alguna otra pregunta, no dudes en envíarnos un email, un washap o llamarnos por teléfono. Siempre te aconsejaremos con objetividad.